¿Qué sabes sobre la arquitectura en cementerios?

Etimológicamente la palabra cementerio proviene del griego, Koimeterion (lugar para dormir). Como breve introducción al lector a la arquitectura en cementerios, decir que los hallazgos sobre los primeros enterramientos con ofrendas funerarias datados nos remontan a Israel, 100.000 años atrás, al Paleolítico Medio.

Toda religión posee ritos para despedir a sus difuntos y aunque el hecho de enterrarlos y dedicarles un lugar de culto es denominador común en la mayoría de ellas, los cementerios no tienen el mismo significado en todas las culturas.

Algunas religiones, como el budismo, optan en la mayoría de los casos por la incineración, al igual que ocurre con el hinduismo, que dicta que tras incinerar los restos de sus seres queridos las cenizas deben ser depositadas en el río Ganges, no destinando entonces un lugar físico establecido para el descanso eterno.

Conoce los cementerios con la mejor arquitectura

A lo largo de la geografía española podemos encontrarnos con cementerios bonitos que son verdaderas obras de arte y procedemos a hacer una pequeña selección de siete de ellos. No queremos decir con esto que sean taxativamente los más bonitos, pero sí declaramos firmemente que son visita obligatoria en caso de realizar un tour del cementerio.

Cementerio de La Almudena (Madrid, 1925)

Sus 120 hectáreas proporcionan descanso eterno a ilustres como Pío Baroja o Santiago Ramón y Cajal. En él conviven diferentes estilos: neogótico, neoclásico, neorrománico y su espectacular basílica modernista.

Cementerio municipal de La Carriona (Avilés, 1890)

Diseñado por Ricardo Marcos Bausá, aúna arte neoclásico, representaciones barrocas, esculturas simbólicas en sus panteones e inspiraciones medievales, además de una capilla neorrománica. Encontramos una de sus maravillas en la tumba de Armando Palacio Valdés: una escultura de Demetria, personaje de su obra La aldea perdida.

Cementerio de La Ballena (Castro Urdiales, Cantabria, 1893)

Mezcla de estilos neoclásico, modernista y gótico. A destacar sus representaciones de ángeles, entre ellos "el ángel de la muerte".

Cementerio de San Amaro (A Coruña, 1812)

Con vistas al Atlántico y capilla de estilo neoclásico, este denominado "cementerio marino" cuenta además con diversos motivos de simbología celta, de gran atractivo turístico para escoceses y galeses.

Cementerio de Luarca (Asturias, 1809)

Situado en La Atalaya, con vistas al Cantábrico en esta pequeña localidad asturiana. Entre sus esculturas, panteones y capillas de estilo modernista descansan los restos del premio Nobel Severo Ochoa.

Cementerio de Goiriz (Villalba - Lugo)

Ya desde el exterior se aprecian, superando en altura al muro exterior del cementerio, sus pináculos de estilo neogótico, y una vez dentro podemos apreciar gran cantidad de símbolos religiosos y paganos, como cruces clásicas y celtas.

Cementerio de San José (Granada, 1805)

Situado en la Dehesa del Generalife, forma parte del conjunto histórico de La Alhambra y cuenta con más de 19 patios en sus 110.000 m2 de terreno y con una capilla neorrománica de 1908.

Los ritos funerarios han experimentado cierta evolución y se han ido enriqueciendo, al igual que la arquitectura en cementerios y demás estructuras relacionadas con las ceremonias de despedida a los nuestros. Los siete que hemos citado constituyen verdaderas joyas de nuestro patrimonio artístico y le animamos a visitarlos debido a su belleza y singularidad.