¿Qué puedo hacer con las cenizas de mi mascota?

Deja que tu mascota te acompañe siempre incluso cuando ya no esté.

Sabemos que despedirnos de nuestro perro o gato es una situación muy difícil, es por ello que en este post te vamos a hablar sobre métodos que cada vez más gente está utilizando para tener presente a sus mascotas cuando hayan fallecido. Estas opciones hacen posible guardar un recuerdo muy especial de nuestros mejores amigos y llevarles siempre con nosotros:

Plantar un árbol: Una opción muy original y que además contribuye positivamente a la preservación del medio ambiente es plantar un árbol. Además, esta opción puede aportar mucha paz al poder verlo crecer.

Esparcir las cenizas en su lugar favorito: Si quieres realizar un bonito homenaje a tus mascotas para que sigan siendo felices allá donde estén, ¿Por qué no esparcir sus restos en su parque o pradera favoritos?

Crear un diamante: Actualmente, existen empresas con avanzada tecnología que se encargan de diseñar a tu gusto un diamante mediante la transformación de las cenizas. Puede escogerse el corte, el tamaño, el color, y vienen acompañados de un certificado de autenticidad.

Retrato: Mezclando carbón natural con las cenizas, es posible crear un material cuyo uso es óptimo para pintar retratos. Podemos hacerlo nosotros mismos o contratar un profesional si no somos demasiado creativos.

Recuerdo de cristal: Mediante cenizas integradas en cristales de bohemia pueden crearse bonitos recuerdos hechos a mano, para ello se utilizan hornos y se moldea el cristal en exclusivas formas, colores y diseños.

Cementerio para mascotas: Existen diversos cementerios para mascotas por todo España en los que puedes depositar las cenizas, guardadas en una urna. Si quieres apostar por una opción ecológica existen, incluso, urnas biodegradables.

Escultura: Al igual que en la opción del retrato, mezclando las cenizas con barro pueden crearse esculturas muy representativas.

Reliquiarios: Si lo que necesitas es llevar a tu amigo siempre contigo, puedes depositar los restos en pequeños reliquiarios que se venden en tiendas especializadas, y usarlo como pulsera o abalario.