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Si existe algún acontecimiento que verdaderamente marque un antes y un después en nuestras vidas, eso es, sin duda, el fallecimiento de un ser querido.
En el caso de personajes famosos de la industria de la música, el cine, el deporte… su muerte no solo conmociona a su familia y/o amigos más cercanos, sino a todo aquel que le siga por sus méritos o incluso a sus posibles detractores, o gente a la que les resultaba indiferente antes de su muerte.
En este post, vamos a mencionar brevemente las 3 muertes más sonadas de los últimos tiempos:
- Paul Walker: Falleció en 2013 debido a un accidente automovilístico en el que su coche se incendió. Paul iba acompañado de su amigo Roger Rodas y ambos murieron en el acto, al parecer, debido a un exceso de velocidad que jugó en su contra. Este caso fue especialmente mediático debido a que el actor estaba grabando la séptima temporada de Fast and Furious en el fatídico momento, posteriormente, la productora usó diferentes técnicas para terminar la película e incluir a Paul Walker en las escenas.
- Amy Winehouse: Murió en 2011, con tan sólo 27 años, debido a una severa intoxicación por consumo de alcohol. Amy fue descubierta tendida en la cama de su residencia por su guardaespaldas, que trató de despertarla sin éxito. Cuando llegó a la conclusión de que no tenía pulso ni respiraba, llamó a los servicios de emergencia que, finalmente, la declararon muerta.
- Michael Jackson: Su muerte sucedió en 2009, y posiblemente, fue una de las más lloradas por los miles de sus fans. En un primer informe, la causa de la muerte fue por paro cardíaco, pero días después, el mundo se sorprendió al conocer el resultado de la autopsia forense: paro cardíaco producido por un suministro de propofol. Este hecho conllevó el arresto de su médico Conrad Murray, sentenciado por homicidio involuntario.
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